Las medidas buscan garantizar la seguridad tanto de quienes trabajan en las obras como de sus familias
La pandemia ha impactado a distintos rubros y uno de los afectados ha sido el inmobiliario. Las medidas sanitarias han condicionado el funcionamiento de obras, el abastecimiento de materiales y las ventas. En ese sentido, desde el área han buscado implementar iniciativas que permitan su funcionamiento y, por consiguiente, su repunte.
En esa línea, la presidenta de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) Valparaíso, Marisol Cortez, comentó a El Observador que han creado varias alternativas para reactivar el sector y, al mismo tiempo, cuidar la salud de todos quienes se desempeñan en él y sus familias.
“La Cámara Chilena de la Construcción, junto con el Ministerio de Economía y las mutuales realizaron un protocolo muy estricto para las empresas constructoras, para las empresas inmobiliarias y también, para los proveedores. De tal manera, que pudiéramos proteger de mejor forma a nuestros trabajadores”, dijo Cortez.
Dicho reglamento incluye los cuidados mínimos como son el uso de mascarilla, alcohol gel y el distanciamiento. . También, Cortez explicó que contempla “los aforos y el tener una planilla, donde pueda saber quiénes son los que están trabajando. Por lo tanto, también puedo tener la trazabilidad, puedo hacer el testeo y, si es que llega el caso que alguien se contagiara, puedo aislarlo rápidamente y tener clara la información”.
Asimismo, en Fase 1 se agrega un PCR de entrada a todos los que ingresen a las obras en construcción y la obligación de las empresas privadas de contratar movilización propia, para que el personal no tenga que usar el transporte público. Además, se está llevando una campaña interna para concientizar a los trabajadores sobre la importancia del cuidado en el hogar.
La misma presidenta de la CChC Valparaíso explicó que “ya sabemos que en las obras se contagian ocho veces menos que en su propia casa o en su entorno. Por lo tanto, es súper importante que esa comunicación llegue a la familia. La gente que normalmente llega contagiada a una obra, llega contagiada desde su entorno, desde su casa y no se contagian –casi nadie- en obras. Por eso es tan importante la aplicación correcta del protocolo”.
