Los microbuses, que fueron descubiertos en La Calera, habrían pasado por varios propietarios.
LA CALERA.- Dos personas quedaron a disposición de la justicia por receptación, luego de una investigación realizada por un equipo especial del Servicio de Encargo y Búsqueda de Vehículos de Carabineros. Se recuperaron dos microbuses que circulaban con sus series de chasis y motor adulteradas, que eran clonadas de otros vehículos.
La clonación de vehículos es una práctica que consiste en tomar los números de registros de un móvil, como la patente, número de motor o chasis, y transferirlo a otro con iguales características. En la práctica, el vehículo al que se le trasfirieron los documentos es un clon del móvil original, con los mismos registros y con apariencia semejante.
En el caso descubierto el miércoles en La Calera, eran dos microbuses que prestaban servicios en las comunas de la provincia de Quillota, a los que se les habían clonado su chasis y número de motor. Las máquinas que andaban circulando eran robadas, pero con sus documentos copiados de otro microbuses que ya habían sido dado de baja.
La clonación de vehículos está tipificada como un delito en el Código Penal. En los últimos años se ha hecho muy recurrente, pues es una forma que utilizan los ladrones de vehículos para “legalizar” los móviles robados y darles una nueva vida, lo que hace muy difícil que los propietarios los puedan recuperar y obstaculiza la labor de búsqueda de la policía.
Hay dos detenidos por estos casos, de 34 años, que tiene antecedentes penales y otra persona de 63 años, sin antecedentes.
Sin embargo, la investigación pretende ir mucho más allá, pues al menos uno de los microbuses habría pasado por varios propietarios a sabiendas que su existencia era ilegal, por lo que detrás de este hecho hay más personas involucradas o en conocimiento del delito de clonación.
