El volante Juan Pablo Miño juega por Brujas de Salamanca y se defiende diciendo que tiene videos para demostrar que nunca agredió
DEPORTES.- Al volante Juan Pablo Miño se le recuerda con cariño por parte de os hinchas de San Luis. No en vano el volante argentino integró el plantel de los canarios que ascendió el 2009 y que en esa temporada fue campeón del Torneo de Apertura, justamente con un gol anotado por Juan Pablo Miño en el Estadio “Ángel Navarrete Candia” de Limache.
Luego de salir de San Luis el jugador defendió otras camisetas en el fútbol chileno como las de Deportes Iquique, Santiago Wanderers, Unión San Felipe entre otros y en esta temporada se sumó al plantel del Club Brujas de Salamanca, elenco que juega en la Segunda División Profesional.
DURA ACUSACIÓN
Fue justamente en el último partido de los salamanquinos frente a Provincial Osorno en que el ex jugador de San Luis fue expulsado y gravemente acusado en el informe del árbitro de ese encuentro, Bastián Pavez
El árbitro en su informe acusó de agresiones por parte del experimentado futbolista: “Ser culpable de conducta violenta; el jugador se acerca al árbitro de manera agresiva para protestar una decisión arbitral, empujándolo deliberadamente con el pecho. Acto seguido, le propina un cabezazo en el pómulo y, de forma simultánea, le pisa el empeine con los estoperoles, evidenciando una conducta violenta e intencional”, da a conocer el informe.
MIÑO SE DEFIENDE
Ante la gravedad de las acusaciones, Miño conversó con Primera B Chile para dar su versión de los hechos: “El informe me pareció que está muy alejado a la realidad de lo que pasó al momento de mi expulsión”, comenzó manifestando y luego agregó, “todo comienza por una jugada que el árbitro debió haber cobrado a favor nuestro y no lo hizo; luego viene el gol de Osorno. En ese momento voy a buscarlo para reclamar por qué no cobró falta antes del gol y ahí quedamos cara a cara, pero jamás tuve la intención de pegarle un cabezazo al rostro. En ningún momento lo insulté”.
Según Miño, la tarjeta roja fue mostrada de manera inmediata y sin que el juez le entregara una explicación: “Además tengo videos que muestran que en ningún momento le pego un cabezazo en la cara al árbitro”, terminó manifestando el volante argentino.