Los guardias del tribunal penal debieron intervenir para tratar de poner fin a la pelea.
LA CALERA.- Una riña entre las madres de tres imputados de un robo con violencia obligó a suspender, por casi una hora, las actividades normales del Juzgado de Garantía de La Calera.
Esta situación se produjo en la mañana del martes 3 de junio y culminó con daños en el establecimiento de justicia, donde fue quebrado uno de los cristales que está en el ingreso al juzgado.
La riña
En los momentos previos, se estaba realizando una audiencia de control de detención y formalización de tres personas, por su presunta participación en un violento delito de robo. Por lo anterior, se decidieron diversas medidas cautelares para los tres sujetos; sin embargo, la madre de uno de los imputados se habría molestado porque su hijo había quedado en reclusión, lo que ella argumentaba que no correspondía.
Fue así que surgió una discusión entre las madres, que en un principio fue de sólo gestos y palabras- apenas perceptibles en la primera sala de audiencias del juzgado calerano. El altercado continuó en el hall de recepción del establecimiento, donde los gestos y palabras que se manifestaron en la audiencia terminaron en golpes.
Los guardias del juzgado debieron intervenir y lograron minimizar la violenta pelea entre las mamás, quienes disentían sobre el grado de responsabilidad que habían tenido sus hijos en el robo con violencia. Una de ellas habría dicho que a su hijo le estaban asignando una participación en el ilícito que no se condecía con el papel que él había tenido en el robo.
La riña obligó a suspender, por unos 45 minutos, las audiencias en las dos salas del Juzgado de Garantía de La Calera. Finalmente se lograron calmar los ánimos de las mamás, que llegaron a exasperarse a tal punto que una de las puertas del juzgado penal recibió un golpe que trizó el cristal. La mujer que realizó esta acción deberá responder por este daño en el recinto.