Un recorrido por los grandes triunfos y fracasos de la institución que este lunes conmemorará un nuevo aniversario, con una ceremonia que se realizará en el Complejo Deportivo “Manuel Arancibia Valencia”
Una sala del Instituto Quillota, hoy Rafael Ariztía, fue el lugar donde el 8 de diciembre de 1919, un grupo de alumnos y exalumnos de dicho establecimiento, liderados por el director del colegio, el marista francés Louis Tiron —el hermano Luis—, se reunieron para crear una institución dedicada a la práctica del fútbol. En dicha reunión se eligió al exalumno Manuel Calcagno como primer presidente del naciente club y al que bautizaron como “Ex Alumnos del Instituto Quillota Football Club”.
Poco tiempo después, el 4 de enero de 1921, el club cambió su nombre por el de “San Luis Football Club”, en homenaje al hermano Luis, quien se trasladó, por orden de la Congregación Marista, al Colegio San José del Callao en Perú. En 1922 San Luis ingresó a la Segunda División de la Liga de Quillota, torneo que conquistó de forma invicta. Esto le permitió llegar a la Primera División del fútbol amateur quillotano en 1923.
La Trilogía de Oro
En 1928 San Luis se convirtió en la base de la selección de la Liga de Football de Quillota y el representante más importante del deporte de la ciudad. Entre los jugadores de ese año destacó la denominada “trilogía de oro”, compuesta por tres futbolistas quillotanos que llegaron a ser integrantes de la selección chilena: Óscar Alfaro, Carlos Hill e Iván Mayo. El 14 de noviembre de ese año San Luis tuvo su primer amistoso internacional, enfrentando al Club Atlético Chalaco del Perú, que en medio de su gira por Chile visitó Quillota y donde fue derrotado por los canarios por 4 a 3, ante 3 mil personas en el Estadio Arredondo.
Su Ingreso al Profesionalismo
En el año 1953 San Luis ingresó a la Segunda División y debutó con un 1 a 1 frente a Santiago National en el Estadio Municipal de Barrancas. Al final de su primera temporada en la segunda categoría, terminó en el penúltimo lugar. En 1955 formó un plantel que combinó la base de jugadores de las divisiones menores con futbolistas de larga trayectoria y peleó palmo a palmo el primer lugar con su clásico rival, Unión La Calera.
A falta de una fecha, el conjunto canario se encontraba puntero, a dos puntos de distancia del elenco calerano, por lo que le bastaba un empate con Trasandino en Los Andes para lograr el título. Como una gran cantidad de gente quería acompañar al equipo, la dirigencia contrató un tren que denominó como el “tren de la victoria”, en el cual también viajaba todo el plantel. Sin embargo, la comitiva retrasó su camino al Estadio Ferroviario de Los Andes, y los futbolistas no llegaron a tiempo para el encuentro final, que el árbitro dio por suspendido por la no presentación de los sanluisinos y la victoria fue de Trasandino por 1-0. A la misma hora, Unión La Calera disputaba su encuentro con la Universidad Técnica. Con la derrota sanluisina, el conjunto calerano necesitaba un triunfo para forzar un partido de definición. No obstante, el partido en La Calera terminó 1-1, lo que significó para los canarios obtener el título de la división y el ascenso por primera vez a la máxima categoría del fútbol chileno.
El equipo de 1957 realizó la mejor campaña histórica del club quillotano en la Primera División.
La Mejor Campaña y Polémico Descenso
En el año 1957 la institución formó un plantel con la base de los años anteriores, gran parte de ellos quillotanos, más tres refuerzos argentinos: Héctor López, Roberto Rodríguez y Juan José Negri. El equipo disputó el título de la máxima categoría junto a Audax Italiano y, a falta de tres fechas para terminar el campeonato, y con dos puntos de diferencia, los canarios cayeron por 2 a 0 ante los itálicos.
En enero de 1958 Ferrobádminton presentó una denuncia en contra de San Luis por la mala inscripción de Negri, quien había autorizado a los canarios a poner sus iniciales en su contrato mientras se encontraba en Brasil. El Tribunal de Penalidades desestimó la causa por estar fuera de plazo, pero Universidad Católica, que perdió el triangular y debía descender de categoría, apeló gracias a un reglamento de la Federación que difería en el tiempo para imponer la denuncia. El Tribunal certificó la falta y le restó seis puntos a San Luis, lo que significaba que la “UC” mantenía la categoría y el descenso debía definirse entre Ferrobádminton y O’Higgins. Estos dos clubes protestaron y en mayo de 1958, la Asociación Central, mediante facultades extraordinarias, decretó el injusto descenso de San Luis con la resta de 13 puntos, lo que originó la mayor movilización popular en la historia de la ciudad, cuando el 8 de mayo cerca de 8 mil quillotanos marcharon a Santiago, pese a lo cual se ratificó el descenso de San Luis.
El Equipo de los “80” y la Tercera División
En 1980 San Luis consiguió el Campeonato de Apertura de Segunda División y también el campeonato de la misma divisional, contando con importantes jugadores como Patricio Yáñez, Víctor Cabrera, Jorge Muñoz, Freddy Bahamóndez y Uruguay Graffigna. El club duró una sola temporada en Primera y bajó a Segunda a fines de 1981. En 1984 el equipo quillotano nuevamente llegó a Primera División. Su paso sería un poco más extenso que el anterior, pero siempre marcado por la irregularidad.
Luego de una mala campaña, en 1990 el club canario desciende a Tercera División. Su paso por el fútbol no rentado duró 12 años, ya que recién en 2003 consiguió el título de la categoría, al vencer como visita por 1-0 a Iberia de Los Ángeles. De esa forma, aseguró el primer lugar de la Liguilla por el ascenso, disputada además por Deportes Linares, Barnechea, UNIACC y Constitución Unido.
Entre los jugadores que brillaron en aquella campaña figuran Felipe Salinas, Víctor Rivero, Jonathan Varas, Eduardo Sepúlveda, Álvaro Villalón y el goleador Humberto Suazo, quien más tarde tuvo una destacada trayectoria en el fútbol nacional e internacional y defendió de gran manera la camiseta de la Selección Chilena en las Eliminatorias para el Mundial 2010 y el Mundial de Sudáfrica.
Luego, en 2009, bajo la dirección técnica del argentino Diego Osella, el equipo realiza una buena campaña, destacando su solidez defensiva y su eficacia en ataque. El equipo amarillo se adjudicó el Torneo de Clausura de Primera B luego de ganar 3 a 2 a Deportes Copiapó en el Estadio Municipal “Ángel Navarrete Candia” de Limache.
Luego, ante Santiago Wanderers, San Luis perdió la opción de subir y debió disputar la Liguilla de Promoción ante Provincial Curicó Unido. Tras perder en Limache por 1-2, en San Fernando los canarios vencieron por 3 a 0 regresando a la Primera División.
Pero el 2010 vuelve a descender y tendrían que pasar cuatro temporadas para que, en la competencia del 2014-2015 y con Víctor Rivero en su debut como entrenador, los quillotanos volvieran a ascender, permaneciendo en la Primera División hasta el 2018, cuando vuelve a caer a la Primera B.
Nuevo Aniversario
Permaneciendo desde ese momento en la Primera B y con la Familia Villegas como máximos accionistas, los canarios se preparan para cumplir sus 106 años y nuevamente buscar el ansiado ascenso a la Primera División en la próxima temporada, contando con el debut como entrenador de Humberto “Chupete” Suazo.
La celebración del nuevo aniversario se inició con la realización de una competencia infantil denominada “San Luis Cup” y este lunes 8 de diciembre se realizará una misa en recuerdo de los socios, jugadores e hinchas fallecidos y luego una premiación a los más destacados del año.
