El miércoles 21 de noviembre de 1984 la ciudad quedó vacía. El Estadio Santa Laura se llenó de caleranos que festejaron el retorno a la máxima categoría
DEPORTE REPORTAJES.- En un día como hoy, pero hace 41 años, La Calera se revolucionó. Cuenta el mito que el miércoles 21 de noviembre de 1984, las calles de la ciudad estaban prácticamente desiertas, incluso hay quienes se atreven a señalar que ese día más de la mitad de los habitantes de La Calera, no estaban en la comuna.
Hace cuatro décadas Unión La Calera consiguió su segundo ascenso a Primera División, en aquel recordado e histórico partido disputado en un Estadio Santa Laura repleto hasta las banderas, con hinchas caleranos que viajaron en bus, autos particulares y en tren hasta la capital, para ser testigos de un partido que quedó en el recuerdo de todos, hasta el día de hoy.
Los rojos, que cumplieron una gran campaña con un equipo formado con jugadores de casa, coronaron un año soñado, enfrentando al desaparecido equipo de Súper Lo Miranda por la Liguilla de la Segunda División.
Las más de 20 mil almas presentes en Santa Laura, gritaron desaforados el mítico gol de tiro libre de Juan “Tripa” Santibáñez, en el arco sur.
Lo que vino después, con el pitazo final y la consagración del ascenso a Primera División, fue solo fiesta, en el estadio, en el viaje de vuelta y en las calles de La Calera. Los caleranos celebraron toda la noche el regreso a Primera después de 10 años en los “potreros”.

JUGADORES DE CASA
Y UN GRAN ENTRENADOR
El torneo de Segunda División de 1984 -que se dividió en varios grupos- fue una fiesta permanente para los caleranos. El equipo estuvo 18 fechas invicto y fue campeón de su grupo. Sin embargo, el cuadro rojo debió disputar una liguilla con los mejores de las otras series. Sus rivales fueron los equipos de Súper Lo Miranda, Santa Cruz y Curicó.
Pero el inicio fue complejo esa temporada. En las primeras fechas, los resultados no fueron los esperados y su técnico, el mítico Jorge Toro –seleccionado nacional en el Mundial de 1962- dejó su cargo.
En su reemplazo llegó Alfonso Sepúlveda, quien ya había estado años atrás con buenas campañas.
Jorge “Kiko” Chahuán, fiero volante de contención de ese recordado equipo, valora el trabajo de Sepúlveda y lo califica como fundamental. “El ‘Chepo’ nos paraba muy bien y le sacaba provecho a las individualidades, manejaba muy bien el plantel. Él es prácticamente mi padre futbolístico”, señala el panelista de la “Sintonía Roja” de Radio Observador.
Sepúlveda era un técnico “zorro”, que no solo sabía planificar muy bien los partidos y que supo sacarles rendimiento a sus jugadores. El propio “Chepo” manifestó alguna vez que ese equipo, el de 1984, fue su ideal personal. “Fue un plantel que pude guiar a lo que quería. Era un grupo alegre, de buenos compañeros y excelentes futbolistas, con una proyección enorme. Varios llegaron a la Selección Chilena”.
Así como Óscar Andrade lo hizo en 1961 (el primer equipo campeón de Unión La Calera), Alfonso “Chepo” Sepúlveda también hacía hincapié en la disciplina. “Sabía, por la experiencia de los años anteriores, que ser futbolista profesional en La Calera es muy difícil. La ciudad ofrece muchas tentaciones que han dejado en el camino a grandes proyectos de jugadores. Yo me preocupé mucho de la vida personal de los muchachos”, explicó, y tanto se preocupaba que días previos a los partidos, visitaba por la noche a sus jugadores, “vigilando” que se portaran bien.

El talentoso mediocampista Juan Carlos Vera, también destacó la importancia de Alfonso “Chepo” Sepúlveda, el director técnico de ese equipo –“para mí el más grande de todos los entrenadores que tuve”- y también la unión y compañerismo de un plantel formado en casa. “Estábamos todos comprometidos, éramos todos jugadores de la zona, de La Calera, Artificio, La Cruz, Papudo. Era nuestro objetivo el tener a Unión La Calera en Primera División. Eso nos hizo ser fuertes, sentir los colores como propios”, señaló.
Aún los hinchas caleranos recuerdan lo conseguido por ese plantel, conformado en un gran porcentaje por jugadores de casa, de la misma comuna o comunas cercanas. Los fanáticos tienen grabados los nombres de Daniel Díaz, Abraham Giadalah, Eduardo “Cacho” Rojas, Jorge Alarcón, Cristian Jelvez, Domingo Gutiérrez, Jorge “Kiko” Chahuán, Mario “Chueco” Vásquez, Juan Carlos Vera -la estrella y el talentoso de ese equipo-, Santibáñez, Zurita, Daniel Ahumada, y otros más.
CALERA CAMPEÓN
La campaña se coronaría luego con el título de campeón de Segunda División. Unión La Calera enfrentó en partidos de ida y vuelta a Deportes Concepción, que también había ascendido en el Grupo Sur y sin jugar una liguilla.
El 25 de noviembre, aún con el sabor de los festejos, Unión La Calera recibió a los penquistas en el Estadio Municipal de La Calera y venció por 3 goles a 0, confirmando el gran nivel de ese equipo.
El 2 de diciembre se disputó el partido de vuelta, en Collao, y terminó empatado 2-2, resultado que le permitió a los jugadores de Unión La Calera festejar el título de campeón de Segunda División, dando la vuelta olímpica en el sur del país.
Ese fue un premio añadido a lo que ya se había vivido en el Estadio Santa Laura y que confirmó que ese año, Unión La Calera fue el mejor.

