DEPORTES. — La derrota del domingo pasado ante el recién descendido Santiago Morning, significó el final de una etapa para San Luis de Quillota. La eliminación de las opciones de clasificar a la Liguilla habría provocado un desmantelamiento casi total del plantel profesional y la salida del cuerpo técnico.
En los días posteriores al crucial duelo en La Pintana, el Grupo CVU, administrador del club, habría decidido no renovar la gran mayoría de los contratos de los futbolistas y puso fin al ciclo del director técnico Fernando Guajardo, cuyo rendimiento se resume en dos triunfos, seis empates y una derrota en su periodo a cargo.
El propio Fernando Guajardo ya había anticipado su posible salida tras el encuentro que sepultó las aspiraciones del club.
“Obviamente que me puede costar el puesto y creo que tiene que ser así, una instancia donde deberíamos haber logrado los tres puntos, mi cargo siempre va a estar ahí, siempre quiero lo mejor para San Luis”, manifestó Guajardo tras el fatídico partido ante Santiago Morning.
El Desafío 2026
Con la mayoría del plantel 2025 liberado, la planificación de la “Misión Ascenso 2026” parte prácticamente desde cero. La única certeza es que la dirigencia evaluará la continuidad de algunos jugadores clave que ya no tienen contrato.
Según detalló el portal SoyCanario.cl, actualmente, solo cuatro jugadores del equipo principal se mantienen ligados al club con contrato vigente, aunque su futuro aún está en evaluación: los delanteros Sebastián Parada (25) y Martín Carreño (20) y los volantes/defensas Martín Larraín (22) y Lucciano Moreno (22).
Según se informó, a ellos se suman cinco jugadores que regresarían de préstamo de otros clubes y que deberán ser evaluados por el nuevo cuerpo técnico: Yerald Pinilla (San Antonio Unido), Carlos Hormazábal (Trasandino), Miguel Espinoza (San Joaquín), Mateo Guerra (Deportes Limache) y Miguel Figueroa (Quintero Unido).
La dirigencia ha iniciado el proceso de planificación, entendiendo que “nada está asegurado” de cara a la próxima temporada, lo que augura una profunda reestructuración en el equipo canario, donde ahora deberá iniciar la búsqueda de un nuevo entrenador para la temporada 2026.
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