Por Roberto Silva Bijit
Fundador Diario “El Observador”
Las cifras son muy malas para el gobierno. La encuesta Pulso Ciudadano refleja con claridad que hay un descontento con la gestión del Presidente. En pocas palabras: un 25,4% lo aprueba y un 63,4% lo rechaza. Existe un 11,1% de encuestados que dijo que no sabe. Una verdadera condena, quedarse con menos de un tercio, que es el porcentaje mínimo que debería tener conforme a la orientación política general de los chilenos. El viejo tema de los tres tercios: izquierda, centro y derecha. Pero ya no se puede leer de ese modo. Hay 18 agrupaciones políticas en el Congreso Nacional. El centro agoniza, con la DC con “una pata en el cajón”. Los radicales salieron de vacaciones o tienen licencia hace ya mucho rato. El movimiento que encabeza Parisi. La división de la izquierda entre los PC, los del Frente Amplio y los antiguos Concertación. La increíble subdivisión de la derecha.
Se pueden usar muchos argumentos, pero tener un 25% de aceptación es un problema para todo Chile, no solo para Boric. Necesitamos un gobierno que sea más aceptado y que su respaldo político sea mayor. Tener ese respaldo se traducirá, más temprano que tarde, en una dificultad para la gobernabilidad del país.
Hay tres factores claves que le pesan al gobierno y que ya le pesaron en el plebiscito: la creciente inseguridad, la crisis económica expresada en una inflación que hace subir los precios y la falta real de un Estado de Derecho que sea capaz de imponer las leyes chilenas en todo el territorio de la república.
Mientras eso no cambie, la aprobación seguirá debajo del 30%, lo cual también traerá inmovilidad legislativa y paso lento en todos los procesos.
Precisando los otros datos de la encuesta, respecto del órgano que debiera redactar una nueva Constitución, un 42,9% se inclinó por una nueva Convención Constitucional, elegida democráticamente, más el apoyo de un comité de expertos. Por otra parte, un 30,5% prefiere que directamente la redacte un comité de expertos y sólo un 7,5% señala que la escriba el Congreso.
Los resultados del plebiscito fueron abrumadores porque sus números exigen cambios. No se trata de seguir interpretando a la gente (que ya votó) sino de reorientar los esfuerzos gubernamentales para tener otra elección de convencionales, ponerles un comité de expertos y esperar que la redacción del nuevo texto sea sencilla e inteligente, sensata, prudente, como lo fundamentaron los electores, que no estuvieron con los extremos políticos del país
Respecto de la preocupación ciudadana sobre la violencia y la seguridad, la encuesta arroja cifras que reiteran lo que otros análisis de opinión han venido marcando, sobre en qué instituciones confían los chilenos. El lugar más alto en la confiabilidad lo tienen los bomberos, con un 86,9%; la PDI con un 43,3% y los Carabineros con un 38,9%. (Tienen más de diez puntos de aprobación que Boric).
Los peor evaluados, a los que los chilenos les tienen menos confianza, son los partidos políticos, que apenas llegan al 1,7%, seguidos del Congreso con un 4,5% y del sistema de Justicia, con un 6,1%.
Llegó la hora que los políticos y los jueces inicien una campaña para explicar sus problemas, determinar si lo que faltan son leyes, recursos económicos o planificación. O las tres juntas. Buscar soluciones es contribuir a alcanzar una mejor gobernabilidad en Chile.
Imagen Freepik
