Gremios Afutram y Afusam manifestaron su rechazo a las acusaciones y criticaron la forma en que fueron expuestas
Una grave denuncia presentada por el concejal Camilo Castillo Limarí encendió las alarmas en el sistema de salud municipal de La Ligua. A través de un oficio dirigido al alcalde, a la Dirección de Salud Municipal y a la Contraloría General de la República, el edil denunció la supuesta existencia de una red informal de venta de horas médicas en el Cesfam local, además de deficiencias graves en la toma de muestras médicas.
“Se ha tomado conocimiento, a través de información seria, de que una persona externa al establecimiento estaría involucrada en la venta informal de horas médicas”, señaló el concejal en el documento, agregando que esta situación podría estar siendo facilitada por “debilidades o vulneraciones dentro de los mecanismos institucionales de asignación y control de agendas médicas”.
El concejal Castillo también advirtió sobre la posibilidad de que esta práctica sea conocida por funcionarios del centro de salud. “Existen antecedentes que indicarían que esta práctica es conocida por parte del personal interno, sin que se hayan adoptado medidas efectivas para investigar o sancionar”, planteó, lo que a su juicio configuraría “una omisión grave en los deberes de supervisión y/o falla estructural en el sistema implementado”.
La denuncia no solo pone en tela de juicio la transparencia en el acceso a la atención médica, sino que también apunta a la calidad del servicio. Castillo detalló que usuarios han reportado un “creciente aumento de mermas en el proceso de toma de muestras médicas”, lo que estaría afectando negativamente el seguimiento clínico y retrasando tratamientos.
“Esto no solo implica un uso ineficiente de los recursos públicos en salud, sino que además genera un perjuicio directo para los usuarios/as”, advirtió. Ante esta situación, solicitó que se inicie una investigación formal, se remitan los antecedentes al Ministerio Público de corresponder, y se fortalezcan los controles internos y protocolos de seguridad.
RESPUESTA DE GREMIOS
A través de una declaración pública, las asociaciones de funcionarios Afutram y Afusam manifestaron su rechazo a las acusaciones del concejal y criticaron la forma en que estas fueron expuestas.
“Manifestamos públicamente el categórico rechazo, preocupación y malestar ocasionados a raíz de las graves declaraciones realizadas por el concejal Camilo Castillo Limarí”, afirmaron. Además, emplazaron al edil a actuar con responsabilidad: “Realizando las denuncias mediante las vías formales y no a través de medios digitales que podrían distorsionar la información y que sólo generan mayor incertidumbre y malestar en la comunidad”.
Los gremios defendieron la labor de los trabajadores de la salud municipal, indicando que “cumplimos nuestro rol con esmero, compromiso y vocación, por lo cual queremos que como tal se nos respete”. También advirtieron que este tipo de denuncias públicas puede poner en riesgo la integridad física y emocional de los funcionarios: “Poniendo en riesgo de agresiones físicas y/o verbales a los mismos”.
Respecto a los hechos denunciados, las asociaciones señalaron que “son temas que deben ser investigados a la brevedad mediante procedimientos formales e institucionales y no mediante indagaciones personales”. Finalmente, reiteraron su disposición al diálogo, pero advirtieron que se encuentran en estado de alerta.