El pequeño es oriundo de La Palma y, en menos de un mes, ha requerido más de 150 transfusiones
QUILLOTA.- Todo comenzó con un moretón en la pierna. Según el niño, apareció ahí sin más, pero sus papás pensaron que, como Vicente siempre jugaba a las peleas con su hermano, pudo habérselo hecho sin darse cuenta. Tampoco hubo explicación para un misterioso sarpullido que apareció en su brazo derecho, pocos días después. “Debe haberse rascado muy fuerte”, pensó la madre, por lo que sacó hora al dermatólogo para el miércoles 8 de enero.
Pese a esta inquietud, para Clara Fernández Galaz había otro problema que debía ser atendido con mayor urgencia, ya que mientras su hijo dormía dejaba gotas de sangre en su almohada. El origen era una muela que tenía picada, la cual supuraba líquido cada noche, por lo que el martes 7 madre e hijo fueron al dentista.
El procedimiento era muy simple: el dentista debía extraer la muela de leche de Vicente Cartes Fernández, de 12 años, sin mayores inconvenientes. Sin embargo, al hacerlo la sangre comenzó a fluir como si se hubiese abierto una llave de agua. Si bien la herida se logró estabilizar, durante la noche el niño nuevamente volvió a tener una hemorragia.
Vicente, quien estudia en el colegio de La Palma e integra la Escuela de Fútbol de Wilson Castillo, se llegó a sentir tan mal que incluso empezó a vomitar sangre. Fue trasladado de urgencia al Hospital San Martín de Quillota y desde ahí hasta el “Gustavo Fricke” de Viña del Mar, donde ingresó a la Unidad de Cuidados Intermedios.
LEUCEMIA
En el centro viñamarino fue diagnosticado preliminarmente con una Púrpura Trombocitopénica”, enfermedad autoinmune que provoca manchas de color púrpura en la piel y mucosas, similar a los moretones. Pero luego de dos días fue derivado a la Unidad de Cuidados Intensivos del mismo hospital, donde su diagnóstico cambió a una grave Leucemia.
A casi tres semanas de su ingreso al centro asistencial, el menor no lo ha pasado bien. “Tiene fuertes dolores de cabeza, se descompensa, llora, extraña estar en su casa con su hermano y sus amigos. Es un proceso bastante complejo para él y para quienes lo rodean”, asegura Clara Fernández, quien agrega que hasta el pasado jueves 30 de enero ya le habían realizado 155 transfusiones de sangre, por lo que necesita con urgencia dadores para devolver la reserva al banco de sangre.
Con la finalidad de hacer más fácil el proceso de donación, la familia ha dispuesto el número de teléfono de la hermana del niño, Bárbara Cartes (+56935554920), para inscribirse. “Hicimos un operativo en el sector de La Palma y, pese a que fue mucha gente, todavía faltan más de 80 dadores para recién devolver toda la sangre que se ha usado en Vicente. Eso sin contar las nuevas transfusiones que se requieran”, comenta su madre.
El niño de doce años, hasta el momento, desconoce su grave diagnóstico, pues su familia y el cuerpo médico no han querido que su creciente estado depresivo aumente, todo esto mientras su madre también lucha por postular a una nueva casa donde cuidar a su hijo durante su recuperación. “Vivimos cerca de un canal y tenemos ratones, por eso estoy realizando trámites en el Serviu para optar a otra casa en las cercanías”, puntualizó Clara.
