Nació con una parálisis como prematura y desde bebé es paciente de la Teletón de Valparaíso. Con apenas 6 años, Ariana Gustavo, demostró que los milagros existen.
Estudia en primero básico el Liceo Veneciano de Llay Llay, se llama Ariana Gustavo y tiene 6 años. En su vida diaria comparte el tiempo entre sus clases, sus idas al trabajo de rehabilitación en la Teletón de Valparaíso y estos últimos meses, en lo que podría considerarse un milagro por sus dificultades motoras: a andar en motociclismo enduro, en los cerros de Aconcagua, gracias a que forma parte de Jahuel Moto Club.
La historia de Ariana es increíble para tener tan poco tiempo en este Planeta. Nació a los seis meses de vida -fue prematura- con una parálisis y desde bebé ingresó a la Teletón, con el fin de recibir un tratamiento integral por discapacidad múltiple. Entre sus varias dificultades de salud, la que más le complica es que padece de atrofias musculares, que le impidieron caminar hasta casi los cuatro años y la mantuvieron en silla de ruedas por largo tiempo. También tiene TEA, pero eso ya casi ni se le nota con el tremendo desplante que tiene cuando conversas con ella.
Su padre Alexis Gustavo, contó a www.observador.cl que provienen de una familia de esfuerzo. Él es feriante y su madre se dedica a la educación diferencial, con la misión de poder comprender y ayudar a Ariana en su desarrollo emocional, familiar y bienestar de salud.
Amada por sus padres y muchas veces poco comprendida por sus compañeros de colegio, por sus condiciones, Ariana, hoy salvo a algunas dificultades del habla, conversa con personalidad y feliz por lo que es protagonizar un acto heroico: su recuperación avanza a pasos agigantados y eso le permite disfrutar de la pasión de subirse a una motocicleta y debutar este año en las competencias de los campeonatos Tres Valles y Zonal Centro Enduro, que se realizan en la Región de Valparaíso.
Hace unas semanas, aunque no terminó la carrera del Zonal Centro Enduro en Rinconada de Los Andes, en la última vuelta por cansancio y deshidratación, recuperó sus fuerzas y alegría con un helado en compañía de su padre que la sigue muy de cerca en cada giro que da por el circuito infantil.
“Me faltó una última vuelta y no la di. Disfruté mucho la carrera. En la primera vuelta de reconocimiento iba con nervios”, detalló la pequeña con ojos llenos de vida.
Su padre cuenta que actualmente recibe un tratamiento con “fisiatra y todo lo necesaria por una parálisis que sufrió al nacer. Ahora que está en las motos le subieron un kinesiólogo”.
“Nosotros somos una familia de caballos, pero a ella le gustan las motos. Además, es TEA, pero ese es el único ruido fuerte que no le molesta. Nosotros la apoyamos y los tíos de la Teletón también. Al igual que el tío Juan Pino. Verla arriba de una moto es una batalla ganada, un verdadero milagro”, sentenció Alexis, quien agradeció a toda la gente que los apoya para sacar adelante los sueños de Ariana.
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