El sujeto estaba con el beneficio de la libertad, pese de tener una orden de aprehensión vigente por tráfico de drogas
LOS ANDES.- Es conocido como “El Guatón Giuliano” y cuenta con un amplio prontuario policial por diversos delitos vinculados a la Ley 20.000, vale decir, tráfico de drogas. El sujeto tenía una orden de aprehensión vigente por este mismo ilícito y además un quebrantamiento de condena. Hasta se sospecha que para evitar ser capturado huyó por un tiempo hasta Argentina, lugar donde habría permanecido refugiado.
Sin embargo, sus andanzas terminaron este sábado gracias a un funcionario de la PDI y el trabajo coordinado de Carabineros de la Tercera Comisaría de Los Andes. Todo comenzó cuando un funcionario de la Policía de Investigaciones, perteneciente a la Brigada de Antinarcóticos, hacía uso de su día libre caminando por el centro de la ciudad.
Eran las dos de la tarde y la jornada era agradable, hasta que a lo lejos divisó a alguien que le parecía familiar. Era un sujeto que caminaba junto a un menor de no más de cinco años, quien al ver al oficial de la PDI comenzó a acelerar el paso buscando huir sigilosamente. Sin embargo, el oficial también apuró el paso hasta que lo alcanzó.
Procedió a efectuarle un control de identidad, ante lo cual recibió un nombre falso como respuesta. También, en algo muy insólito, el sujeto dijo no conocer su Cédula de Identidad, por lo que el policía le pidió que lo acompañara al cuartel a fin de lograr identificarlo. En ese momento, el “Guatón Giuliano” empujó al funcionario, dejó abandonado al menor y salió corriendo por la intersección de calles O´Higgins con Yerbas Buenas.
El detective lo persiguió, hasta que el sujeto ingresó a un local de comida rápida ubicado en calle Papudo. Allí, “El Guatón Giuliano” amenazó de muerte al oficial simulando que tenía un arma en la espalda.
Ante el riesgo de ser baleado, el funcionario policial sacó su arma de servicio, lo que no intimidó al delincuente, quien logró escabullirse entre las mesas e ingresó a una vivienda aledaña, luego que una persona abriera la puerta para mirar el alboroto que ocurría en la calle.
Desde ahí se descolgó por los techos, en lo que parecía propio de una película. “Mientras el sujeto huía a través de los techos, solicité apoyo a carabineros para continuar la búsqueda”, dijo el funcionario de la Brianco.
El oficial logró ingresar a las viviendas y perseguir al individuo, hasta que el sujeto fue detenido en un domicilio abandonado en calle Yerbas Buenas.
“Presentaba una herida expuesta, la cual correspondía a una operación que se había realizado anteriormente. Lo que sucedió fue que cayó desde dos metros en su huida, lo que habría provocado que la lesión se agravara”, afirmó el detective.
DE REGRESO A LA CÁRCEL
El verdadero nombre del “Guatón Giuliano” es Cristián Méndez, de 41 años, quien obtuvo el beneficio de la libertad condicional a fines de abril de 2016, gracias a la decisión de la Corte de Apelaciones de Valparaíso luego de haber cumplido la mitad de una condena de 5 años y un día por tráfico de drogas.
El problema es que hubo un antecedente que no se notificó en su momento a Gendarmería y que pudo frenar su salida, ya que tenía una medida cautelar de prisión preventiva, dictada por el Tribunal de Garantía de Los Andes, en otra causa.
El antisocial está acusado de liderar, desde la cárcel de Los Andes, una banda dedicada al tráfico de drogas, la cual fue desbaratada hace dos años. Tras ser formalizado en el Juzgado de Garantía de Los Andes, fue decretado su ingreso a prisión preventiva tras la audiencia de preparación de juicio oral.
Además, se pudo establecer que el menor regresó a su hogar y se encontraba sano y salvo, a pesar de ser abandonado en la calle por su propio abuelo.
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